martes, 21 de agosto de 2012

Aprendiendo más sobre: Hudú o Hoodoo

Últimamente ha salido el tema varias veces, y he estado investigando mucho más, ya que me doy cuenta de que el primer libro sobre mágia que tuve y con el que aprendí es de un practicante de Hoodoo, y todos estos años, al mismo tiempo que practicaba Wicca, la mezclaba con todo tipo de técnicas y preparados de Hoodoo. Así que en cierto modo, me doy cuenta de que soy practicante de Hoodoo,  pero debo profundizar más en su historia, no solo en sus técnicas.




Para empezar, es importante empezar comparando el Vudú y el Hoodoo, ya que son muy parecidos, ambos provienen de la misma raíz, aunque también tienen muchas diferencias. A pesar de que en Hoodoo también hay prácticas religiosas, el Vudú es visto como una religión en sí, y el Hoodoo como un sistema de prácticas mágicas. Y ambos son practicados en el estado de Louisiana, en EE.UU.

Un practicante de hoodoo tiene las mismas funciones que el Haitiano Houngan o que un Mambo, un sacerdote o sacerdotisa Vudú. Sin embargo el practicante de Hoodoo de Louisiana es más como el Bokor que existe en Haití.  Pero sin la reputación negativa que tiene el bokor en Haití.

Incluso la palabra Hoodoo se ha convertido en un término de argot que significa “mala suere o infortunio”. Una persona que parece estar teniendo una racha de mala suerte se dice que está “hoodooed” (como huduizado).

La palabra Hoodoo empezó a usarse porque en 1812 se prohibió la religión vudú en Louisiana, cada vez que intentaban un arresto, ellos lo frustraban argumentando que estaban practicando hoodoo, no vudú, y claro, ninguna palabra tal como hudú estaba registrada entre las prácticas prohibidas.

En 1887 la mayoría de los vestigios del vudú haitiano había desaparecido de Louisiana, dejando solo el aspecto comercial de la práctica mágica del Hudú, como el bokor en Haití. La religión vudú se mantuvo en una parte de la cultura y la historia de Louisiana.  El Hoodoo de Louisiana es un vástago del tradicional Vudú Haitiano. Aunque vudú no es hoodoo y viceversa. Vudú es una religión, mientras que hoodoo es un sistema de magia popular afroamericano común en Louisiana y los estados del sur.

La mayor diferencia es que los practicantes de hoodoo no invocan a los loas (espíritus africanos), invocan a los santos católicos que representan a los loas, es un sistema de magia práctica en tierra americana con mística cristiana.

En el siglo XVIII se añadieron al Hoodoo salmos de la Biblia, sellos y talismanes del sexto y séptimo libro de Moisés, magia de las velas, el uso del incienso y otras cosas que provenían de la influencia europea. De los Nativos Americanos se añadió el uso de las hierbas y la curación y algunas de sus prácticas mágicas, ya que aprendieron de ellos.

Los practicantes de Hoodoo de Louisiana trabajan con magia buena y mala. Se dice que el Bokor trabaja solo con el camino de la mano izquierda, con el mal, y que los sacerdotes Vudú, solo con el camino de la mano derecha, el bien. Pero en Hoodoo trabajan con el camino de ambas manos.

La práctica de dibujar Vèvès en la tierra y edificios para representar espíritus / loas usada en el vudú, no se usa en el hoodoo. Los vèvès pertenecen a la diversidad cultural originaria, no al cristianismo.

Antes de 1803 la policía local de Nueva Orleans intentó detener las reuniones cuando se enteraban de donde ocurrían sus reuniones secretas. En 1881, un tercio de la población blanca ya había abrazado lo que quedaba del vudú como religión y del hoodoo como práctica mágica.

Pero las reuniones siguieron ocurriendo, en secreto, hablando de ellas en susurros, solo se podía acudir por invitación. Muchas de estas reuniones se volvían salvajes, con danzas desenfrenadas, y casi siempre terminaban en orgías y borracheras.

Se empezaron a fabricar muñecos fetiche, originarios del Congo. Normalmente estaban tallados en madera, con la parte del estómago hueca para poder llenarla de ingredientes. Una vez construido, este muñeco era estratégicamente situado en áreas como las esquinas de las habitaciones, en la puerta de entrada, o en cruces de caminos. Cada vez que una persona se acercaba o pasaba junto al muñeco, podía ser influenciada por la energía contenida en el muñeco. Los muñecos fetiche eran muy temidos porque los muñecos congoleses originarios se utilizaban para desprender energías negativas, causar enfermedad o muerte.

En cuanto a los altares usados en Hoodoo, tienen tres alturas, de forma escalonada. Y en estas tres superficies colocan estatuas e imágenes de santos católicos. Un candelabro de siete brazos se pone en el altar, portando velas de cada uno de los siete colores del arcoiris. Porque se asocia cada color con un tipo de magia. También colocan en el altar harina de maíz con un huevo situado encima, representando Danbhalah. El altar también incluye una estatua de la Virgen María, que representa a Erzulie, y otra de San Antonio de Padua, que representa a Legba. Sanbhalah, Erzulie, y Legba son la trinidad en Vudú y Hoodoo.

Algo que me ha parecido muy curioso es que adoran a Black Hawk (Halcón Negro) (1767-1838), un líder indio de la tribu Sac. Todavía hoy en día el espíritu de Black Hawk es muy temido por la gente. Su culto fue introducido en el hoodoo en Nueva Orleans por una practicante de Chicago a principios de los años 20. La mayoría de los grandes y prósperos músicos de Jazz pertenecían al culto de Black Hawk.
Es un texto original de Dandelion, La bruja verde, todos los derechos reservados.



5 comentarios:

  1. Hola Birken: Me ha gustado mucho la información que haz recabado del HODOO, es sumamente interesante y es importante hacer la diferencia entre la religión vudú y el hodoo, ya que en el común de la gente tiende a juntarlos o creer que son lo mismo.
    Algunos se refieren al vudú como sistema mágico solamente no una religión.
    Y tienes mucha razón en mencionar que los "jazzistas", pertenecían a estos cultos de hoodoo, ya que ellos en sus letras siempre colocaban mensajes místicos que al ser escuchados provocaban una reacción en el oyente.
    GRACIAS POR COMPARTIR TUS CONOCIMIENTOS CON NOSOTROS.

    ResponderEliminar
  2. BirkenHexe, enhorabuena por tu escrito. No soy practicante de lo que podemos llamar "Paganismo" propiamente dicho. Aunque sí que tengo algún conocimiento del mismo, ya que he publicado algo sobre religiones celtíberas y magia europea. En cuanto a Religión decir que Soy Tata Nquisi Malongo, es el nombre que se le da al sacerdote de Mayombe (sería el equivalente a Houngan del vudú practicado en Cuba y Santo Domingo) y Babalocha (sacerdote de Osha) estaba buscando unos datos para un escrito y tropecé con el tuyo y me gustó bastante, ya que normalmente no se suele escribir con objetividad sobre estos temas, al menos en España, ya que aquí el tema del Voodoo / Hooddoo/ o Mayombe por poner algunos ejemplos de religiones (voodoo / mayombe) y praxis mágica (hooddoo) con las mismas raíces (Benín, Antiguos Reinos de Dahomey, Reinos Bakongo) son muy desconocidos y se suelen temer y demonizar, cuando, en realidad, son Religiones realmente gratificantes, con una teología realmente rica en matices y conocimientos amplísimos (realmente asombrosos), con un conocimiento mágico, de la naturaleza y del reino vegetal, animal y mineral, tan increíble, que diría ( y lo digo desde una base sólida ya que mi profesión es la neurobiología) que es ciencia y física pura, de conocimientos aún día desconocidos a los profanos, y puesta al alcance del brujo. (Continuo)...

    ResponderEliminar
  3. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  4. Y como energía que es, puede emplearse para hacer mucho bien (caso de Mambos, Houngan, Tatas Nquisi) o, desgraciadamente, para mal (normalmente practicados por Bokor en vudú, o Ndoki en el Mayombe). Siempre pongo un ejemplo:la electricidad es energía pura. Si sabemos dominar la electricidad podemos utilizarla para bien (dar luz a una casa, calentarnos con un brasero, cocinar con una vitrocerámica...) o para malo (freir a una persona en una silla eléctrica) La energía es energía y no entiende de su uso. El deber del brujo es saber manejarla. Ya está en su ética para qué lado de la balanza se inclina. Es un tema interesante que te invito a debatir más adelante en el blog, ya que no estoy totalmente de acuerdo en eso que se llaman algunos paganos el "triple retorno", ya que realmente, conociendo bien las leyes de la magia (y da igual cual magia practiques, de qué tradición, credo, dogmas y región del mundo) puedes dirigir la energía hacía donde quieras. Es simplemente saber canalizarla.
    Me he dado un pequeño paseo por tu blog, (cuando tenga unos ratitos lo haré más tranquilamente) y me ha gustado mucho ese artículo de La brujería y el secreto. Estoy totalmente de acuerdo. Yo sin ir más lejos tengo una gran vida pública, una profesión en la que tengo que guardar mis creencias sino quiero que mis colegas me vean como un bicho raro, y sin embargo muy poca gente sabe que soy Tata, salvo la familia, mis ahijados/as (iniciados en la religión que algún día serán sacerdotes) y la gente que viene a que la ayudes. Ya no solamente es por decisión propia, también soy un acérrimo defensor de que estos conocimientos tienen que ser secretos y puestos solamente al alcance del que está preparado. Por ejemplo, en nuestra religión, nadie puede acceder a ciertos secretos sin tener una serie de "grados" o iniciaciones. Iniciaciones que han demostrado que se está preparado para llegar a ellos. Ya que hay que comprender que el conocimiento hay que saber dominarlo porque si no puedes hacer un mal uso de él, o inclusive explotarte en la cara. Es como darle las llaves de un formula 1 a un chico que se acaba de sacar el carnet de conducir.

    No obstante, aunque se encuentren escritos en internet desvelando algunos de estos secretos, si no se tienen las iniciaciones correspondientes, sería como tener el manual de instrucciones de esa central eléctrica pero carecer de la propia central eléctrica, porlo que a la persona no le servirían para nada.

    Todo es cuestión de lógica. Es increíble el conocimiento que se pudo traer de África!

    Volviendo a tu artículo Birken, solamente una corrección, los fetiches congos que mencionas, llamados Nkisis, e imagino que te refieres a ellos porque mencionas que se pone la parte mágica en el estómago, casi nunca se utilizan para hacer el mal, precisamente se suelen utilizar para todo lo contrario, aunque hay muchos tipos. Por poner un ejemplo están los Nkondis, que son los guardieros, protegen al sacerdote o a la comunidad, e incluso interceden en la curación y en la justicia. Los que sí se usan con finalidades menos "limpias" son los llamados "Kini Kini" pero esos no se "cargan" de esa manera. Son religiones muy bonitas que os invito a leer desde un punto de vista objetivo sin verlas como algo demoniaco que nada tiene que ver. Un saludo afectuoso y les deseo lo mejor. Birken, mi enhorabuena, seguiré leyéndote.

    ResponderEliminar

En este blog se moderan los comentarios, tu comentario aparecerá tras la revisión y aprobación de la administradora del blog.