Haciendo balance

Todos los años, dependiendo del blog o el entorno en que esté trabajando, publico un balance de cómo ha sido mi año, este mes han pasado 16 días, debería haberlo publicado antes, pero realmente estoy bastante ocupada (algo que debo agradecer). Así que este año, nada de Océanos, ni de scrapbooking, estoy aquí en La Bruja Verde con vosotros, y la cosa pinta bien, parece que me voy a quedar aquí mucho tiempo.

Tengo que agradecer muchas cosas de este año, hace algunos años, cuando dejé mi trabajo, me lamentaba de la cantidad de años que había perdido en ese trabajo, sin continuar mis estudios y mi práctica mágico-espiritual más allá de lo que fuera trabajar con mis guías, Tarot y cosas así. Hoy en día me doy cuenta de que el aprendizaje realizado durante esos seis años en aquel trabajo tiene un valor incalculable, y de que las experiencias duras son las que más nos hacen aprender, crecer y mejorar. He cuidado de personas, he sacado adelante a personas, he aprendido a reconocer a todo tipo de personas y entornos familiares, he aprendido de personas de toda índole. Esos años no fueron en vano.

Pero yo quería volver a ser yo, y seguir por el camino que tuve que abandonar, así que desde que dejé el trabajo me propuse volver, recuperar conocimientos perdidos, refrescar los que ya tenía, profesionalizar mis conocimientos, y llegar a algo con todo esto. Así que comencé releyendo todos los libros que tenía sobre estos temas, haciendo cursos y haciendo muchos planes. Cómo hacemos los capricornio, trabajando duramente, sin prisa pero sin pausa, no importa el tiempo que haga falta para llegar al objetivo, sino llegar a él, y hacerlo bien, estando preparado.

Así llevo ya unos añitos. Cuando comenzó 2018 hice un plan de acción, durante 2018 aprendería y estudiaría todo lo que pudiera sobre los temas que ya sabía y sobre lo que me quería dedicar en el mundo mágico-espiritual, y cuando llegara 2019 me pondría en marcha. Lo hice con tanta fuerza, y usando tantos recursos, por ejemplo leyes universales, visualización, manifestación con los ciclos lunares, con mis tramas de cristal, en fin, muchas cosas que yo hago, que el plan pareció llevarme él a mí en vez de seguirlo yo a él, y antes de que llegara 2019 ya había entrado en acción, primero me hice mi Patreon a finales de octubre, y luego comencé a hacer tiradas de Tarot, porque vosotros mismos me las pedíais, y también limpiezas energéticas. El canal se levantó mucho más, en un año ha crecido casi 4000 suscriptores, y poco a poco me estoy dedicando en exclusiva al esoterismo, que todos los que están a mi alrededor y son sinceros, saben que es mi vocación y a lo que me tengo que dedicar. Obviamente si me ves desde los 12 años echando las cartas, y usando péndulos, y hablando de fantasmas y de brujas, y adivinando cosas que no puedo saber, pues sabes a que me tengo que dedicar. ¿Sabéis que antes de ponerme la ortodoncia tenía la famosa cruz de Caravaca en el cielo de la boca? algo muy tradicional en este oficio por estos lares.

Este año ha sido, trabajar, trabajar, trabajar, hasta tal punto que me salia humo por las orejas. Por la mañana y por la tarde, sin parar. Por eso no entiendo a los que envidian el éxito de los demás, o buscan llegar a donde están otros sin esfuerzo, no puedes llegar a nada sin tomar acción. 

También creo que ha habido momentos en que me he dejado llevar y no he sido yo, y me arrepiento, pero, cómo ser humano que soy, pienso que es normal.

Estoy muy agradecida por multitud de cosas, no solo por todo lo aprendido, sino ¡por toda la abundancia! me abruma la gran abundancia y cómo (debo admitir que he trabajado mucho con la energía universal) he recibido casi al instante todo lo que necesitaba para mi camino y trabajo espiritual. Multitud de personas me han dicho lo que les gusta lo que hago, tantas personas me han dado las gracias, por algo que en realidad me sale de dentro. Y he encontrado a personas que me apoyan muchísimo, que hemos conectado, que me ayudan, y que incluso hay veces que he llorado de ver que hay personas que valoran tanto lo que hago. Gracias, un millón de veces.

Además este año he comprendido que aunque algunos no lo entienden, tengo una especie de necesidad de compartir en cuanto a temas espirituales, a veces tengo una sensación en el chakra del corazón, que me dice que no queda tiempo, que hay que hacer algo, que hay que ayudar espiritualmente, que hay muchas personas que quieren aprender y que hay que ayudarlas, y en esos momentos he dado material hasta la extenuación, vamos, hasta acabar con fiebre en la cama, literalmente.

A veces siento que a pesar de llevar toda la vida en esto no lo sé todo, pero por lo menos no finjo que lo sé, trato de ayudar con lo que sí sé, e intento aprender más día a día, todos los días me formo y practico.

2018 no ha sido de esos años en los que sientes que eres feliz, pero si de esos años en los que sientes que eres capaz, que tienes poder, que puedes ayudar, que puedes conseguir cosas, y lo más importante, toda mi vida, la gente que me rodea me ha dicho "tienes dones", "eres bruja", "has heredado los dones de los abuelos", algunos admirados, y otros muertos de miedo, y siempre me he preguntado por qué, por qué soy así, y ahora estoy usándolos mucho más para ayudar a otros.

No siento 2019 como un año nuevo, sino como una extensión de 2018, y continúo en el mismo camino, trabajando incansablemente.

Es un texto original de Dandelion, La Bruja Verde, todos los derechos reservados.