Para conseguir que un cristal trabaje para tí con un objetivo, o te pueda ayudar a conseguir algo concreto, tienes que programarlo, hoy vamos a aprender cómo se hace, y como se desprograma cuando hayas conseguido lo que necesitabas.
Aunque el simple hecho de tener cristales a nuestro alrededor es beneficioso de muchas maneras, para conseguir algo concreto hay que programarlo. Para ello, lo primero es limpiar el cristal (aquí se explica como), después debemos tener en mente el objetivo específico que queremos conseguir, ¿quieres curarte?, pero ¿de qué?, quieres amor, ¿pero qué clase de amor? ¿amistad, amor familiar, una pareja, una aventura?, debemos saber bien que queremos.
A continuación investiga que cristales pueden servir a tu propósito, para ellos puedes buscar en libros sobre cristales o en Internet, cuando sepas cuáles de tus cristales te pueden ayudar, escoge uno de ellos, sosténlo en la palma de tu mano, o entre tus dos manos, lo qué te sea más cómodo. Dependiendo de la persona, hay distintas maneras de conectar con el cristal, algunas personas solo lo sostienen en la palma de la mano y sienten su energía, otras lo tocan y van dándole vueltas para reconocerlo por completo, otras se imaginan una luz que sale del cristal, algunas lo tocan, lo huelen, incluso lo lamen si no es venenoso, para tener más cercanía con el cristal y conocerlo mejor. En mi caso, suelo tocar el cristal, lo acaricio, le voy dando vueltas, lo sostengo entre mis manos y lo voy tocando.
Ahora cierra los ojos y siente su energía, explícale lo que quieres que haga por tí, concrétamente que quieres que haga por tí. También puedes decir "te programo para que hagas (...)".
Esta programación se puede hacer solo una vez si es algo fácil y concreto, algo de un día, por ejemplo calmar un dolor, o hacerse todos los días durante unos minutos si es un objetivo a largo plazo.
Una vez que el cristal haya trabajado para tí, y hayas conseguido ese fin, es conveniente desprogramarlo. En mi caso yo vuelvo a tomarlo entre mis manos como expliqué antes, le agradezco lo que ha hecho, y le digo que ya ha cumplido su misión y que puede descansar. A continuación se vuelve a limpiar, y si se puede, estaría muy bien dejarlo sobre la tierra, entre plantas, o bien en un bosque, parcela en el campo, jardín, o si no tienes, puedes dejarlo en tus macetas.
Es un texto original de Dandelion.
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