Siguiendo con el tema de las
limpiezas psíquicas, hoy vamos a hablar de la “higiene psíquica”, un
concepto del que podéis haber oído hablar por ahí, se suele decir que para los practicantes
mágicos y espirituales es importante tener una higiene psíquica adecuada. La
higiene psíquica consiste no solo en limpiarse físicamente con frecuencia, sino
también psíquicamente, en limpiar los varios cuerpos sutiles para realmente no
tengamos problemas que pueden afectarnos en el futuro debido a una “higiene deficiente”.
Hace tiempo que aprendí esto, si
queréis saber más os recomiendo un libro de Christopher Penczak llamado The witch’s shield, pero hoy la que
habla soy yo, Dandelion, y os voy a contar como va todo esto, mi opinión, mis
gustos, mis experiencias, y cómo lo hago yo. Voy a intentar que sea simple y
resumido.
Seguramente sabéis, que además de
tener un cuerpo físico, tenemos varios cuerpos sutiles, dependiendo de la
tradición o religión, el número de cuerpos sutiles puede ser mayor o menor (por
ejemplo, en el Kundalini Yoga son diez), en mi opinión, el número aumenta,
porque los cuerpos están unidos a los planos sutiles, y hay tradiciones que
subdividen cada plano en superior o inferior, y de ahí que haya el doble de
cuerpos sutiles en algunas tradiciones, también hay tradiciones que consideran
innecesario distinguir entre dos de ellos y los unen. El número habitual de
cuerpos son 1+3, es decir, el cuerpo físico más los tres cuerpos sutiles.
Dependiendo de la tradición también el nombre de los cuerpos sutiles puede
variar, es posible que cada vez que leas sobre esto leas nombres distintos o
que algunas tradiciones den a distintos cuerpos el mismo nombre. (En el blog
también hay otra antigua entrada hablando de los cuatro cuerpos que podéis leer
AQUÍ.) Ya que hay tantas tradiciones
que organizan los cuerpos de manera distinta, por favor, no os obsesionéis con
esto.
¿Y cuáles son esos cuatro cuerpos?
El cuerpo físico: es el más sólido de todos los cuerpos que
poseemos. Es nuestro cuerpo material, el que conoce todo el mundo. Pertenece al
elemento Tierra.
El cuerpo emocional: también recibe otros nombres como cuerpo
astral, cuerpo psíquico, cuerpo onírico, etc. Tiene que ver con nuestros
deseos, sueños, sentimientos, esperanzas y temores. Cuando dormimos, interactúa
en el plano astral. Pertenece al elemento Agua.
El cuerpo mental: necesita limpiarse con frecuencia debido a que
estamos siempre pensando, dándole vueltas a todo, estresados, y hay personas
que están llenas de conflictos mentales. Pertenece al elemento Aire.
El alma: también es llamado yo interior o yo superior, está asociada
a un alto nivel de conocimiento espiritual, es el cuerpo más energético y el
más protegido, a menudo cuando estudiamos sobre estos temas leemos lecciones
cómo qué “el alma no se puede matar,
porque es inmortal”, aunque si se puede dividir y perder fragmentos, y
también recuperarlos. Está asociado al elemento Fuego.
Limpieza
Para tener una correcta higiene
psíquica o espiritual, lo correcto es hacer con frecuencia una limpieza a cada
uno de los cuatro cuerpos. La frecuencia depende de la persona, hay quien se
las hace una vez a la semana, otros al mes, y otros tardan más. Una vez a la
semana es un hábito correcto.
Para cada una de estas limpiezas,
os recomiendo que tengáis en vuestra mente que son gestos rituales, qué no es
cualquier cosa, podéis crear un espacio sagrado si queréis, y recomiendo mucho
pedir la ayuda de vuestros guías y dioses. También recomiendo limpiar
energéticamente y consagrar cada ingrediente que vayáis a usar para tareas cómo
“eliminar toda la negatividad”, o
similares. En mi caso, es curioso, pero a mí me gusta repetir como si fuera un
mantra el nombre de mi dios tutelar, para mí hace el acto más sagrado, por
ejemplo cuando tomas un baño ritual.
Cuerpo físico: se puede limpiar con incienso, hay multitud de
inciensos que pueden servir para esto, mis preferidos son salvia, lavanda, pino
o cedro. Debes estar desnudo y pasar el humo del incienso por cada parte de tu
cuerpo, con la intención de eliminar cualquier negatividad. Eso sí, por favor,
intentad que sea incienso de verdad, para estos casos intentad tener un par de
cajitas de incienso bueno, o sino directamente usad la hierba en un
carboncillo.
Cuerpo emocional: una manera de limpiar el cuerpo emocional es
haciendo un baño ritual para ello, prepara una muñequilla, es decir un trozo de
gasa o tela relleno con hierbas, luego unes los extremos y lo atas. Añade al
baño sal marina, una muñequilla con hierbas que sirvan para purificar y agua
del grifo. Consagra las tres cosas para la limpieza, y sumérgete, mucho mejor
si intentas sumergirte lo más que puedas o vas sumergiendo la cabeza también de
vez en cuando para que la limpieza sea completa. La visualización es también
importante aquí para eliminar la energía.
Cuerpo mental: El cuerpo mental se limpia meditando, y si es a
diario mucho mejor. En mi caso uso la meditación que os expliqué con el prana,
que podéis leer AQUÍ. Pero pueden
servirte otro tipo de meditaciones, la meditación de conciencia plena, que se
centra en fijar la atención en la respiración, o la meditación fijando la
atención en un mantra, etc. También pueden servirte otros tipos de
meditaciones, puedes buscar algo más complejo, como meditaciones relacionadas
con los chakras.
Alma: una técnica curiosa para limpiar el alma es una meditación
que consiste en ponerse un rato al sol y visualizar como la energía o el “fuego solar” limpia la negatividad que
haya en nuestra alma, o hace arder esa negatividad.
Espero que os haya gustado, es
bastante simple pero útil, de hecho, si lo hacéis os daréis cuenta de lo útil
que es y lo bien que funciona y lo bien que sienta.
Un texto original de Dandelion.
1 comentario:
me encanta, esto es la verdadera magia, y no jugar a las embrujadas, jejeje, gracias por la recomendacion de los libros, un besito de siete
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